Apariencias, autoengaño, mentiras, huidas...
Al final, la realidad supera, la verdad quiere escapar por cada poro
Al final, la realidad supera, la verdad quiere escapar por cada poro
En cada acción, en cada lágrima, en cada angustia, en cada
crisis.
Perplejidad, complicidad de una mente sin descanso…
Paren el mundo que me quiero bajar?
O paren el mundo que me quiero subir?
Punto límite que te obliga a leer la historia,
la propia historia donde uno no se reconoce como
protagonista
Porque, ¿cómo fue que llegó hasta allí?
¿Quién es el autor de esta novela?
Bien uno puede decir que el mundo conspira en su contra
o que a veces el destino se compadece y le da una que otra
alegría
Y esa es la cuestión, asumirse protagonistas
o escapar para siempre cuan víctima de un autor perverso
que con su pluma hace y deshace nuestra historia a su gusto.
Una vez me dijeron “no cuestionarse es de sabios”
¡Vaya sabiduría de la que me encuentro lejos!
Hoy decido empezar de nuevo
abrir una puerta que hasta hoy estuvo bajo llave
me dispongo a encontrar dentro lo más oscuro y lo más bello
a llorar, gritar, enojarme,
pero también a reír,
entusiasmarme y construir.
MOVERME, MOVILIZAR, MOVILIZARME,
DESPERTAR TODOS LOS SENTIDOS,
PASAR POR TODAS LA EMOCIONES,
RECONOCER TODAS MIS DEBILIDADES
Y POTENCIAR TODAS MIS FORTALEZAS
SENTIRME VIVA!
Porque como dice un clásico y genial dicho:
¡Pucha que vale la pena estar vivos!